20 septiembre 2006

El castillo del silencio

El camino al Castillo del silencio hay que recorrerlo con paso certero. Nada que lo pueda despertar de su eterna ensoñación debe crujir bajo tus pies. Tu respiración ha de ser medida, con aliento sordo y pausado ritmo.

No te preocupes, la puerta se abrirá a tu paso cuando llegues. Pero una vez dentro...

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